martes, 28 de junio de 2011

UNA REVOLUCIÓN QUE FUE UN INFIERNO

Un poco de historia.

28 de Junio (L.M.C.).- El 28 de junio de 1966 Arturo Illia fue derrocado por los militares que comandaba Juan Carlos Onganía, quien inició la primera dictadura de tipo permanente en el país. El presidente radical, quien había accedido al poder con solo el 25% de los votos tres años antes, era víctima de una campaña de desprestigio y no contaba con el apoyo de la sociedad. Muchos aplaudieron la implementación del 5º golpe de estado, sin saber que duraría hasta 1973. Siete años, en los que se producirían "La noche de los bastones largos", "La masacre de Trelew" y se formarían las organizaciones guerrilleras, en otros hechos.

Por Nicolás Souto.


UN POLÍTICO HONESTO. A pesar de que las políticas de Illia fueron exitosas, los corruptos y los que querían que gobernaran los militares lo atacaron por todas partes. Actualmente, Luis Brandoni actua en la obra de teatro "Don Arturo Illia", en donde se recuerda su vida.


Cuando Illia asumió la presidencia, el 12 de octubre de 1963, sabía que la mayoría de los argentinos no lo había elegido (Nota del R: Integró la Unión Cívica Radical del Pueblo (U.C.R.P.) y recibió el 25,14% de los votos). Es que el Partido Justicialista seguía proscripto y, en consecuencia, el grueso de sus adherentes se manifestaban votando en blanco. Por ende, no era dificil pronosticar que éste médico que nació el 04 de agosto de 1900, en la ciudad de Pergamino (Aunque desde 1929 y hasta el 63´ se radicó en Cruz del Eje, Córdoda), iba a tener muchos problemas para gobernar. De hecho, aunque logró bajar la desocupación del 8,8% al 5,2%, disminuyó la deuda externa de 3400 millones a 2600 millones, instauró el salario mínimo, vital y móvil, mejoró notablemente la educación, logró impulsar la "Ley de medicamentos" para que los mismos costarán menos e hizo crecer a la Argentina a más del 9% anual (En 1964 y 1965), solo duró en sus funciones dos años, ocho meses y 16 días.

Mucho tuvo que ver el desprestigio de gran parte de la gente, pero los principales culpables fueron los periodistas. Mariano Grondona, en "Primera Plana"; Bernardo Neustad, en la Revista Todo; y Mariano Montemayor fueron algunos de los que utilizaron la imagen de una "tortuga" para hacer creer que el presidente era lento y carente de energías. Lo mismo hicieron diarios como "Crónica" y "El Mundo"; mientras la Confederación del Trabajo (C.G.T.) inundó el centro de la Capital Federal con tortugas que en su caparazón tenían escritas las palabras "Illia o gobierno". A su vez, hacían ver a los militares como los "salvadores" del país y ensalzaban la figura de Onganía y otros generales.

De este modo, cuando se produjo el golpe de estado a nadie le extraño. Es más, Juan Domingo Perón declaró, desde su exilio en Madrid, que era "la única salida para acabar con el régimen corrupto que imperó en Argentina en los últimos tres años". A pesar de que Illia intentó que el justicialismo dejara de estar proscripto, cuando este ganó las elecciones legislativas de 1965 provocó el descontento de los militares

Mientras tanto, a mediados de la década del 60´, Estados Unidos armaba y promovía dictaduras permanentes en toda América Latina. Y, tras implantar una en Brasil, en 1964, el "granero del mundo" le dio la posibilidad de que aquí sucediera lo mismo.

La persona que se encargó de confeccionar el golpe fue el Comandante del Primer Cuerpo del Ejército: el general Julio Alsogaray. Por su parte, el Comandante en Jefe Pascual Pistarini no intentó detenerlo, sino que le brindó su consentimiento para que todo pudiera llegar a buen puerto.

Así se llegó al 28 de junio de 1966 fue, un día frío y cargado de indiferencia por parte de los argentinos, cuando el mismo Alsogaray se presentó en la Casa Rosada y lo "invitó" a retirarse a Illia. Éste último intentó negarse, pero su despacho fue invadido por efectivos policiales con pistolas lanza-gases y los alrededores del edificio presidencial estaban rodeados. Entonces, decidió irse. El 29 se produjo la asunción de Onganía y todos los conspiradores estuvieron contentos.

El pueblo muy pronto se dio cuenta, exactamente un mes después, cuando se produjo "La noche de los bastones largos" (En breve se realizará una nota al respecto) y cientos de alumnos y profesores universitarios fueron golpeados a más no poder. Esto generó que más de 300 eminencias tuvieran que exiliarse en otros países de América y Europa y así se inició la "fuga de cerebros", que hizo que la Argentina fuera un país decadente, sí de cultura y enseñanza se trata.

En fin, los dictadores denominaron "revolución Argentina" a su gobierno de facto y Onganía permaneció en al poder durante cuatro años. El "Cordobazo" y la pésima marcha de la economía (Nota del R: El ministro de esa cartera era Adalberto Krieger Vasena, el mismo que había actuado en la "revolución libertadora") decretaron su salida y Marcelo Levingston, un militar que pocos conocían y que estaba en Estados Unidos cumpliendo nadie sabe bien que funciones, lo sucedió en junio de 1970. A su vez, solo estuvo nueve meses como presidente de facto, porque un golpe interno de Alejandro Lanusee, Comandante en Jefe del Ejército y hombre fuerte de la "revolución Argentina", lo desplazó. Éste mantuvo la dictadura hasta el 25 de mayo de 1973, cuando asumió Héctor Cámpora (Nota del R: Había ganado las elecciones con el Frente Justicialista de Liberación (FRE.JU.LI.), con el 49,54% de los votos, y no hubo segunda vuelta porque Ricardo Balbín (Candidato de la U.C.R., quien había salido segundo con el 21,3%), reconoció la victoria del Cámpora).

Como el lema de la campaña del "tío" había sido "Cámpora al gobierno, Perón al poder", 49 días después renunció y en septiembre del 73´ se realizó una nueva elección. En ella venció Perón, con el 60,1% de los votos, mientras que la U.C.R. obtuvo el 23,7%. Pero, eso también será el tema de otra futura nota.

Para cerrar la presente, hay que decir que la "revolución Argentina" prohibió, entre otras cosas: la actividad política, cerró el Congreso, suprimió los derechos gremiales, reprimió las huelgas y las actividades obreras, intervino las universidades e implantó la censura, promovió la radicación de empresas multinacionales extranjeras, devaluó la moneda y encareció el nivel de vida y retuvo un porcentaje del ingreso por exportaciones agrícolas para auto-financiarse.

A su vez, durante este período negro, la Argentina no solo vivió la segunda dictadura más extensa (La primera sería la que debió soportar entre 1976-1983), sino que también vio crecer a las organizaciones guerrilleras, como "Montoneros, E.R.P. (Ejército Revolucionario del Pueblo) y F.A.R. (Fuerzas Armadas Revolucionarias), entre otras. A su vez, se produjeron masacres como las de Trelew y Ezeiza (Las mismas serán desarrolladas en otras notas).

En fin, volviendo al principio, hay que decir que Arturo Illia falleció el 18 de enero de 1983 en Córdoba. No pudo ver el regreso definitivo de la democracia, a fines de ese año, y así se fue una de las personas más humildes que tuvo este país (12 meses antes le había sido otorgado el Premio Internacional "Mahatma Gandhi", por los servicios prestados para la humanización del poder). Con solo decir que fue el único presidente que no aceptó la jubilación de privilegio y que solo tuvo una casa en Cruz del Eje está todo dicho. Casi todos los políticos actuales deberían bucear un poco en la historia de Illia y tratar de imitarlo un poco...

 
"Nosotros no venimos a competir con nadie, somos simples periodistas que queremos lo mejor para Justo José de Urquiza”


Copyright © 2009 – LMC – Texto: Nicolás Souto – Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n_Argentinahttp://es.wikipedia.org/wiki/Arturo_Illia - Foto: http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:PP_Illia.jpg - Caseros, 28 de Junio del 2011

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